lunes, 25 de agosto de 2014

Lucha Por Tu Paz


 “Nunca podré tener verdadera alegría si no tengo paz. ¿Y qué es la paz? La paz es algo muy relacionado con la guerra. La paz es consecuencia de la victoria. La paz exige de mí una continua lucha. Sin lucha no podré tener paz".



Hay momentos en que nos damos cuenta que algo no nada bien dentro de nosotras; debido al trabajo, estudios, relaciones, problemas, etc, nos sentimos vacías, impacientes, preocupadas, temerosas del futuro, ansiosas, andamos como esperando que suceda algo. En fin, no tenemos paz. Todo esto nos convierte en mujeres miedosas, inseguras, malhumoradas y tristes. Y llega un momento en que queremos escapar, irnos lejos y comenzar una nueva vida, en otro lugar, con personas distintas.

Muchas son las soluciones que se ofrecen actualmente para encontrar la paz interior, pero yo les quiero hablar de tres pasos fundamentales que de seguro te ayudarán muchísimo.

En primer lugar, debes buscar la paz con Dios. Para conseguirla, tienes que dedicar tiempo para tu encuentro con Él, esto se hace a través de la oración. Cuéntale todo lo que te sucede, lo que te agobia, pídele que te regale su paz pues la paz que nos da Jesús no es igual a la paz que da el mundo. Ten siempre presente que Dios está pendiente de ti, te guía por el camino del bien y te desea todo lo mejor. Abandónate en Él y se hará un milagro en tu vida.

Luego debes encontrar la paz contigo misma. Acéptate tal y como eres y con todo lo que tienes. Debes hacerte responsables de tus actos, hacer frente a los problemas con valentía, tomar las riendas de tu vida, eso te dará seguridad y confianza. Aprende a ser paciente y a tomar buenas decisiones. Dedica tiempo para cuidar tu salud, come sano, lee cosas que te ayuden, descansa, aprovecha el tiempo libre en cosas productivas. Busca momentos de soledad para reflexionar.

Y por último, busca la paz con el prójimo, acepta a los demás con sus defectos y virtudes, no pretendas cambiarlos, pero si está en tus manos, ayúdalos. Rodéate de gente que te valore y te ayude a crecer, despídete de los que únicamente te hagan sufrir. Haz cosas buenas por los demás, por lo más desfavorecidos e indefensos.

Cuando encuentres tu paz, protégela con todas tus fuerzas, que nada ni nadie te la quite.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario